jueves, 24 de abril de 2014

POR QUÉ



Para las personas normales, lo peor de las vacaciones es que se terminan, y a mi después me cuesta un montón volver a la vida habitual. Al principio de este blog os hablaba de la recomendación de Aristóteles de pedir la benevolencia del público, por si acaso. Esto es lo que hago ahora, excusarme por haber tardado en volver. (También Aristóteles dice que el comienzo tiene que ser bueno para atraer la atención; eso lo dejamos para un día inspirado).
Así, mientras recupero la chispa perdida, os cuento lo que pensé el otro día al leer en una revista dominical: 

 "Si no me hiciera preguntas, moriría siendo un idiota".He ahí un hombre inteligente.Se llama Andrei Linde, es un físico ruso afincado en Stanford y uno de los genios actuales. Un supertelescopio acaba de descubrir en el Polo Sur las ondas gravitacionales que explican la teoría de la inflación de Linde: cómo se expandió el Big Bang.
Me he leído la entrevista dos veces, despacio,  para entenderla bien y me gustó mucho que el profesor tenga una pizarra gigante para explicar sus fórmulas. Ojo, no aparecen tablets; sigue escribiendo a tiza. 
La verdad es que nunca había oído hablar de Andrei Linde, como de la inmensa mayoría de los científicos.¿Por qué sabemos el nombre de las personas más dispares, digo disparatadas, cuyo logro principal es, es, ahora no se me ocurre ninguno, y no conocemos el de los científicos,artistas y otros que están mejorando el mundo? Gran misterio. Si hay algún inventor o filósofo por aquí, que por favor nos lo explique.

Un catedrático de literatura -cascarrabias,tímido y encantador- decía que la filosofía había nacido cuando los griegos habían podido sentarse a mirarse el ombligo. Sin preocupaciones  inmediatas -qué comer, contra quién luchar- , se dedicaron a pensar: quiénes somos, hacia dónde vamos....Y hay que reconocerles que discurrieron bastante, y bastante bien. Suele achacarse a los griegos lo poco prácticos que eran, que inventaban cosas, armas, máquinas,etc, y no les daban salida, como dirían los mercantilistas de ahora. No sé si puede simplificarse tanto la cosa, pero es verdad que, comparados con los pueblos de alrededor, cartagineses,romanos y demás, parecían un poco atontados.

Cualquier cosa que nos preguntemos ahora, lo más seguro que es que ya se lo hayan cuestionado los helenos y otros: ¿qué es la felicidad? ¿podemos conocer de verdad algo? ¿quién hizo el mundo, o el Big Bang o la nada anterior? ¿Por qué mi enemigo gana la copa o la liga?. La filosofía no es estudiar el rollo kantiano, es una forma de estar en el mundo. No vegetando, sino viviendo.Tener un hijo preguntón, por ejemplo, puede ser una lata; pero al menos podréis estar seguros de que tenéis en casa a un ser humano, no una planta.

Siempre hemos sentido la necesidad de hacernos preguntas, como el de contar historias: para avanzar y conocer, en el primer caso; para entender y retener, en el segundo.Por eso las dictaduras eliminan siempre a los intelectuales, a los artistas, a los religiosos: son incómodos, se plantean las cosas, remueven conciencias;son hombres libres. 

Dicen que una de las crisis del periodismo -parece que tienen más de una- ha venido porque las preguntas clásicas que debían hacerse: quién, cómo, cuándo, por qué, se han complicado o caducado. Que ahora habría que plantearse otras..Pues no sé qué preguntas son más importantes que ésas, pero en fin.Los gurús sabrán. 

De verdad que siento haber tardado para encima ofreceros una entrada-rollo;espero que no me pase como a un autor teatral norteamericano un poco pesado y prolijo; este fue el comentario que mereció de un célebre crítico:

Ayer tuvo lugar el estreno de su última (!) larga y complicada obra. ¿POR QUÉ? 

1 comentario:

  1. Tu obra, sin embargo Chini, es fácil, ilustrativa y divertida!!!
    gracias por seguir....

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